Y seguimos celebrando el Carnaval.
En esta ocasión, nos hemos dedicado a hacernos unas caretas muy chulas.
Un día las pintamos con pinceles, otro día les pegamos la nariz y la boca que más nos gustaba. Y por último, otro día, les pegamos el palo para poder llevarnos las caretas a casa.
La verdad es que es muy chulo poner pegamento a las cosas y, como si fuera magia, ¡¡¡¡ se quedan pegadas!!!
Nos esconderemos detrás de las caretas a ver si nos conocen nuestros papis, y les diremos: «Cu-cú, ¿quien soy?»
¡Quedaron súper graciosas esas caretas! ¿quién soy?
Ponen mucho interés en el trabajo!!! Da gusto verlos trabajar!!